Divergencias entre políticas públicas de vivienda y la producción del hábitat de la agricultura familiar en Santiago del Estero

Palabras clave

Territorio rural, identidad, modelos de gestión

Resumen

En el ámbito rural de la provincia de Santiago del Estero, la dimensión doméstica del hábitat responde a variables territoriales y socio-productivas, circunscriptas a principios culturales de adaptabilidad a las condiciones sociales, ambientales, tecnológicas y productivas y a procesos sociales complejos asociados a situaciones de comunalidad y autosuficiencia.

Estos aspectos condicionantes de la forma de ocupación territorial, la vivienda (rancho) y equipamiento productivo componen la identidad y el paisaje. Frente a ello, el «Plan Provincial de Vivienda Rural”, bajo una percepción de condiciones deficitarias y de precariedad de las unidades domésticas-productivas, propone erradicar las viviendas ranchos. De esta manera, se imponen tecnologías constructivas industrializadas y se distribuyen las viviendas conforme a criterios de accesibilidad a las vías de comunicación. Lo dicho admite plantear los siguientes interrogantes: ¿De qué manera articulan las políticas públicas de vivienda con la estructura territorial y productiva prexistente? ¿En qué medida las variables mencionadas sustentan una situación de convergencia entre ambos modelos de producir el hábitat? Responder a tales incógnitas permitirá comprobar que la desatención de la dimensión socio-territorial constituye por sí misma un proceso de reconfiguración intencional de los esquemas culturales, alejado de las lógicas que presenta la agricultura familiar en la provincia. Este trabajo propone un enfoque reflexivo sobre las divergencias entre políticas públicas de vivienda rural y estructuración socio-territorial derivada de los modos de pensar y vivir en el contexto rural. Se adopta un abordaje múltiple para el análisis del Plan Provincial de Vivienda Rural considerando procesos de transformación territorial, estructuras políticas, producción de hábitat y patrones culturales con relación al modelo de agricultura familiar. En efecto, se sistematizarán diversas dimensiones de análisis: conceptualizaciones teóricas, jurídicas, ambientales, tecnológicas, geográficas, sociológicas y etnográficas.

Introducción, problema de investigación y justificación

El hábitat en el ámbito rural de la provincia de Santiago del Estero, entrelaza el espacio doméstico familiar con un esquema de producción que utiliza el territorio para resolver gran parte de las necesidades. Es decir, el poblador rural se radica circunscripto a principios, prácticas y saberes adaptados a las condiciones ambientales que persisten en el seno de sistemas comunales. Sin embargo para el Estado, a juzgar por el aspecto material y tecnológico de las unidades doméstico-productivas, les asigna una  condición de vivienda deficitaria. Frente a esta situación, el Plan Provincial de Vivienda Rural implementado se titulará “Plan de erradicación de la vivienda rancho. A su vez, el Plan priorizara la ubicación de las unidades nuevas conforme a criterios de accesibilidad, confinando la intervención a un sistema vial que no comprende la totalidad del territorio rural. Dichas situaciones permiten advertir que cierta tendencia a erradicar de la gestión pública, institucionaliza una medida para la demolición de un episteme consustancial al modo de vida. Por tal motivo, esta investigación busca responder los siguientes interrogantes: ¿Cuál es el nivel de correlación entre las variables territoriales y socio-productivas con la solución del Plan Provincial de Vivienda Rural? ¿Cómo incide la aplicación del modelo de gestión pública  en las pautas culturales y materiales vinculadas a la agricultura familiar?

Hipótesis de trabajo

Este trabajo sostiene que las divergencias entre  política habitacional  y  territorialidades prexistentes, a raíz de la subordinación de las variables que condicionan el hábitat, impactan en los esquemas culturales apartando a la población de sus lógicas, saberes y prácticas.

Objetivo general y específicos

Esta investigación pretende analizar el grado en el que articulan las variables territoriales y socio-productivas con el modelo de gestión  de políticas públicas de vivienda rural. Para tal fin será preciso  caracterizar la dimensión territorial del hábitat al interior del paradigma de la agricultura familiar en aspectos históricos, geográficos, productivos y tecnológicos. Por otro lado se caracterizara el modelo de gestión implicado en responder la problemática habitacional. De esta manera será posible  evaluar la relación de las variables mencionadas. Esto nos permite identificar diferencias y similitudes a partir de la comparación entre las resoluciones del hábitat.

Marco teórico, antecedentes y estado de la cuestión

Las reflexiones sobre el paradigma epistemológico del hábitat en interacción con la política pública y la dinámica ambiental, conceptualmente demanda ramificar la teoría sobre el territorio para acercarnos gradualmente a la unidad domestica productiva.

Territorialidades, estado y hábitat

El territorio es el espacio fragmentado y en transformación en el que se materializan las actividades antrópicas y los fenómenos ambientales y en el cual confluyen  diferentes teorías, métodos, prácticas, dimensiones y escalas (Mançano Fernandes, 2014). Si atendemos a conceptos como ordenamiento territorial y desarrollo económico, frente a la configuración de territorialidades autónomas se manifiesta el contraste entre los actores sociales (Escobar, 2005). Manzanal (2004) advierte sobre dichas divergencias en relación a la adopción de un modelo Estatal y su impacto socio-ambiental negativo. Situación que se manifiesta en conflictos sociales por el derecho a la tierra y la defensa de la naturaleza; reivindicaciones que expresan prácticas, saberes y lógicas del anclaje territorial (Mançano Fernandes, 2014). Dichos procesos emancipatorios pondrán en evidencia la naturaleza insustentable de las prácticas hegemónicas. Donde la multiplicación de conocimientos y saberes de comunidades, activistas, colectivos y movimientos que surgen por fuera de las reglas del episteme moderno, abren el debate del territorio, los recursos de la naturaleza y las formas de gobernanza que vincula a sectores subalternos, academias y  Estado (Rivera Cusicanqui et al., 2016). El territorio entonces funcionara como un instrumento de control del Estado,  mediante el cual identifica y prioriza demandas y necesidades. Cabe señalar que dichas demandas son originadas por estructuras sociales  y burocráticas de la gestión pública y bajo un esquema jerárquico y vertical basado en la eficiencia y subordinación univoca de las partes (Leal Filho, 2011).

Políticas públicas y vivienda

Una postura interesante sobre las políticas públicas plantea Gavilanes (2010) cuando la define en procesos (relaciones sociales, articulación gobierno/particulares y problemática) y su incidencia en el ambiente. De esta manera las dificultades de correspondencia entre régimen estatal y las coaliciones sociales, presentan antagonismos que Lineras (2006) llama Crisis de Estado, por la suspensión y el resquebrajamiento de factores que precisa el funcionamiento, la estabilidad y la capacidad representativa del Estado (correlación social, consenso y conformidad entre el marco institucional-normativo y el colectivo social)

En tanto la vivienda, se compone de variables que inciden en caracterizar el nivel de vida y a partir de las cuales el estado interpreta una problemática y asume la obligación jurídica de dar una respuesta específicas (Barreto, 2008). Sobre ello, Rodulfo (2014) expresa las limitaciones de los objetivos de inclusión social y de derechos a la vivienda por  la falta de sostenibilidad de gestión del recurso público que propicio el paso de un sistema productivo a uno financiero.

Plan Provincial de Vivienda Rural

Con el fin de incluir socialmente al poblador rural,  en la provincia se corporiza la Ley Provincial Nº 6758 que llega a considerar el ámbito geográfico y persigue estructurar el territorio para desalentar el éxodo rural. Es posible interpretar un cambio epistemológico en la propuesta provincial al integrar al sujeto y el ambiente (Sousa Santos, 2011). Asimismo, la puesta en marcha del Programa de Lucha contra el Chagas, problemática que vincula  la proliferación de vectores a las condiciones socio-habitacionales, impulsa la adopción de término “erradicación de la vivienda rancho” por parte del gobierno provincial. Se manifiesta una distancia  entre los principios de adaptabilidad considerados por la Ley en un escenario de fragmentada participación intersectorial.

Hábitat rural y agricultura familiar

La adopción de un modelo agroindustrial por el Estado conlleva a la desaparición y/o desplazamiento del poblador rural en las zonas de mayor intensidad productiva del país. (Reboratti, 2006). Una situación opuesta ocurre en la provincia, presentándose un leve crecimiento de un sujeto que reúne una heterogeneidad de terminos como campesino, pequeño productor, minifundista, productor familiar, originarios, etc. (Paz, 2015). Un rasgo compartido entre ellos es el predominio de actividades agropecuarias, autoconsumo y trabajo familiar. Paz (2014) advierte que la complejidad de la agricultura familiar requiere enfoques desde las dimensiones académico-científicas, técnico-operativas y político-epistemológicas.

“El rancho Santiagueño”

La vivienda rural de la provincia íntegra del espacio domestico con el productivo y está sujeta a las instancias de movilidad producto de la intensa actividad pecuaria y en complementación la agrícola (Di Lullo y Garay, 1969; Paz y Jara, 2012). La tipología arquitectónica resultante es concebida con un método sencillo y adaptado a condiciones socio-ambientales.